Estrés por calor: ¿Estamos listos para afrontarlo?

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El estrés por calor es un conjunto de cambios que afectan a los animales, y su frecuencia está aumentando debido al cambio climático. Los períodos más intensos de altas temperaturas y olas de calor tienen un impacto directo en la productividad, siendo las vacas lecheras las más afectadas.

Estudios en EE. UU. revelan que alrededor del 64% de las pérdidas económicas asociadas al estrés por calor se concentran en la industria lechera (Figura 1).

Figura 1: Pérdidas económicas totales por especie ganadera debido al estrés por calor (EE.UU.)

 

Fuente: Cartwright et al. 2023

 

Una vaca en lactancia expuesta al estrés térmico experimenta una serie de cambios como: aumento del consumo de agua, disminución del consumo de alimento, alteraciones en el metabolismo, reducción en la producción de leche, descenso en el rendimiento reproductivo y aumento en la incidencia de enfermedades. Incluso las vacas secas, expuestas al estrés por calor, se ven afectadas, ya que la disminución en la producción de leche se refleja en la siguiente lactancia.

 

Impacto diferencial según el nivel de producción

Las vacas de alta producción son particularmente vulnerables, ya que su zona de Termoneutralidad (5 a 25 °C) disminuye con el aumento de la producción de leche. En vacas lecheras, se recurre a índices de temperatura y humedad (ITH) para evaluar el estrés por calor. Aunque tradicionalmente se creía que la producción de leche disminuye con un ITH de 72 (ITH <70 confortable), datos recientes sugieren que este umbral se redujo a 68 en vacas de alta producción (>35 kg de leche/día).


¿Cómo influyó la selección para aumentar la producción en la tolerancia al calor?

A medida que la producción de leche aumenta en 10 kg por día, se observa una disminución en el umbral de estrés calórico de 5°C. En otras palabras, a mayor producción de leche, la capacidad de las vacas para tolerar el estrés por calor disminuye, haciéndolas más susceptibles a las condiciones térmicas adversas.


Identificar el estrés por calor: ¿Qué signos aparecen primero?

Si bien en el tambo es frecuente identificar una disminución en la producción de leche, debemos saber que este efecto aparece tardíamente en el animal. Es decir, luego de las 24 a 48 hs de haber acontecido el episodio de estrés térmico aparecen cambios en los niveles de producción. Por lo que es importante observar los animales para identificar los signos más tempranos como el aumento en la frecuencia respiratoria (más de 60 movimientos respiratorios por minuto), el aumento en la ingesta de agua y la reducción en el tiempo de pastoreo. El jadeo severo es el signo más fácilmente identificable de estrés por calor. Las vacas con estrés severo jadean con la lengua afuera, a menudo acompañado de babeo. Aquellas que pastan buscarán sombra o se reunirán alrededor del bebedero.

 

Fuente: Toledo et al., 2019


Impacto Fisiológico: Consumo de Alimento y Comportamiento

Durante episodios de estrés por calor, se observa una disminución en el consumo de alimentos. Esta reducción no es simplemente una respuesta conductual, sino una adaptación fisiológica destinada a contrarrestar la generación adicional de calor metabólico durante la digestión. Se estima que alrededor del 35% de la disminución en la producción de leche se puede atribuir a esta respuesta fisiológica.

Además de los cambios en el comportamiento alimentario de las vacas los periodos de descanso se ven afectados. En condiciones termo neutrales, una vaca lechera típica descansa en promedio de 11 a 14 horas al día. Sin embargo, a medida que aumenta la temperatura ambiente reducen su tiempo de descanso hasta un 30%. Esta adaptación les permite aumentar la superficie corporal en contacto con el entorno, facilitando así la disipación del calor. Sin embargo, la disminución en las horas de descanso contribuye a la disminución en la producción de leche, aumento en la prevalencia de enfermedades y una elevación en la temperatura corporal.

 

Indicadores claves del estrés por calor: ¿cómo evaluarlos?

La frecuencia respiratoria y la evaluación del jadeo (Panting Score) son indicadores fundamentales y económicos para detectar de manera temprana a los animales que experimentan estrés por calor. El tiempo de respuesta fisiológica desde el inicio de la manifestación del estrés es de aproximadamente 1 a 2 horas.

A continuación, se describen los signos que deben ser observados para identificar precozmente a los animales afectados y se clasifican según el grado de severidad.

 

Fuente: Osei-Amponsah et al., 2020

 

Conclusión

  • El estrés por calor afecta negativamente la producción animal, siendo la industria lechera la más perjudicada.
  • Las vacas más productivas son particularmente las más afectadas
  • El organismo pone en marcha distintos mecanismos adaptativos para disminuir el impacto del estrés por calor (e.g. disminución del consumo, aumento de la frecuencia respiratoria, disminución del tiempo de descanso)
  • Hay signos tempranos que podemos observar para dimensionar el grado de estrés: Frecuencia respiratoria y jadeo (panting score)
  • Los cambios productivos incluyen la disminución en la producción de leche, disminución en su rendimiento reproductivo y aumento en la incidencia de enfermedades

 

Este es el primer de una serie de artículos en donde abordaremos estrategias de manejo, nutricionales y reproductivo para sobrellevar el estrés por calor los tambos.

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