Colonización temprana del tracto gastrointestinal esteril

campus porcino

El proceso de colonización del tracto gastrointestinal (TGI) de los lechones, inicialmente estéril, es esencial para el establecimiento de una microbiota diversa y funcional. Este ecosistema complejo alberga una variedad inmensa de microorganismos, incluyendo bacterias, virus, arqueas y hongos, que coexisten simbióticamente en el TGI del huésped y que son claves en la digestión, protección contra patógenos y regulación inmunológica (Fan et al., 2023; Upadhaya 2022).

 

La colonización temprana del TGI en cerdos comienza en el momento del nacimiento y se extiende durante la lactancia. Este período inicial es crucial, ya que es cuando el microbioma intestinal se establece y desarrolla, y se ha observado que influye en la susceptibilidad a enfermedades y afecciones en la vida posterior del animal. Factores como la microbiota de la cerda, el entorno de cría y la alimentación durante la lactancia, tienen un impacto notable en la colonización temprana del TGI de los lechones (Nowland et al., 2019).

 

Las cerdas ejercen una influencia significativa en la formación del microbioma intestinal de su progenie. La colonización temprana del TGI de los lechones comienza con la exposición urogenital y ambiental al nacer, así como la ingestión de calostro y leche durante la lactancia. Es más, un estudio reciente ha sugerido que la transferencia de microorganismos de las cerdas a los lechones puede ocurrir incluso durante la gestación (Bi et al., 2021). Inmediatamente después del nacimiento, el TGI de los lechones se coloniza por bacterias aerobias facultativas o anaerobias, y este proceso dinámico evoluciona hacia la dominación de anaerobios obligados benéficos los cuales forman más del 90% de la microflora (Upadhaya 2022). 

 

Así, debido a la influencia crítica de las cerdas en el microbioma intestinal de su progenie, la manipulación dietética emerge como una herramienta clave, mostrando su capacidad para modular la composición y función de la microbiota intestinal de las hembras e, indirectamente, de sus crías. Específicamente la suplementación materna con prebióticos, probióticos, simbióticos, estimbióticos muestran efectos beneficiosos en la salud de los lechones, incluso a largo plazo, al modular la integridad intestinal de los lechones y mejorar la resistencia a enfermedades. Además, algunos de estos compuestos permiten reducir el estrés oxidativo y la inflamación en la cerda y los lechones, contribuyendo a un ambiente intestinal más saludable (Fan et al., 2023; Kiernan et al. 2023).

 

Por otro lado, la administración de antibióticos y el estrés afectan negativamente la diversidad microbiana, y la inclusión estratégica de probióticos, prebióticos y fibra parece contrarrestar estos efectos (Patil et al., 2020).

 

En conclusión, la colonización temprana del TGI tiene un impacto determinante en la salud y rendimiento de los cerdos. Por estos motivos, las estrategias que promuevan la diversidad y estabilidad microbiana son fundamentales para mejorar la producción porcina de manera sostenible y saludable

 

¡Mantente al día con nuestros episodios!

Únete a nuestra lista de correos electrónicos para recibir las últimas noticias y actualizaciones de nuestros podcasts.

No te preocupes, tu información no será compartida

Estamos en contra del SPAM, nunca te enviaremos información que no sea relevante.