El gran dilema del destete: ¿Categorizar o no categorizar por peso?

campus porcino

A lo largo de la historia, los diversos actores involucrados en la cadena porcina han buscado desarrollar estrategias que logren optimizar los procesos productivos. En la actualidad, dado el notable avance genético experimentado en las últimas décadas, esta premisa adquiere una relevancia sin precedentes.

Diversos elementos vinculados al manejo, la nutrición y la sanidad son constantemente evaluados y puestos en tela de juicio, lo cual conlleva a la imperante necesidad de identificar y definir aquellas técnicas o herramientas que probadamente se ha demostrado que mejoran la eficiencia del sistema.

Un aspecto que siempre ha sido objeto de debate es la categorización de los lechones según su peso al destete al ser recibidos en las instalaciones de recría/transición o Wean to Finish, según el caso de cada granja. Esta práctica consiste en agrupar a los lechones en tres categorías:

  • Livianos (cola del lote).
  • Medianos (cuerpo del lote).
  • Pesados (cabeza del lote).

Desde un punto de vista operativo, la categorización insume un largo período de tiempo y representa un esfuerzo físico considerable para los trabajadores, ocupando gran parte de su jornada laboral, especialmente en granjas donde el destete se lleva a cabo varias veces a la semana.

A pesar de esto, muchos profesionales continúan recomendando su aplicación, argumentando que clasificar a los cerdos de esta manera puede mejorar su rendimiento productivo en las etapas de crecimiento posteriores, ya que permitiría adecuar el manejo nutricional y sanitario para cada grupo de manera específica.

Sin embargo, esto sólo sería posible si en la práctica les brindamos condiciones diferenciales, lo cual ocurre con baja frecuencia, ya que las dietas suelen ser las mismas, comparten un entorno con las mismas condiciones de temperatura y humedad, y el acceso al alimento y al agua es idéntico para todos los grupos.

En este sentido, se han llevado a cabo diversas investigaciones con el objetivo de resolver esta incógnita, buscando cuantificar de manera precisa las implicancias que tiene esta práctica en términos de productividad.

De acuerdo con una investigación realizada por Faccin et al. (2020), donde se evaluó, durante toda la etapa de recría/transición, el desempeño de lotes de lechones clasificados y no clasificados según su peso al destete, no se observaron diferencias productivas significativas como resultado de la realización de esta práctica. Estos resultados coinciden con hallazgos previos de Bruininx et al. (2001).

Figura 1. Desempeño productivo de grupos de lechones en el período 0-42 días postdestete, agrupados o no según su peso al destete.

Faccin et al. (2020) también evaluaron el nivel de uniformidad en el peso de cada grupo, ya que una mayor homogeneidad facilita y agiliza la posterior comercialización de los animales, un aspecto altamente apreciado en la industria porcina que permite optimizar la utilización de las instalaciones. Inicialmente los grupos categorizados por peso mostraron una mayor uniformidad en comparación con los grupos no categorizados. Sin embargo, debido a factores intrínsecos al comportamiento animal, esta condición se fue diluyendo a medida que avanzaba el estudio, registrando tanto los grupos categorizados como los no categorizados un coeficiente de variación de peso similar a los 66 días de edad. Similares resultados fueron observados por Fels & Hoy (2013).

Figura 2. Coeficiente de variación del peso corporal en grupos de lechones, agrupados o no según su peso al destete, en diferentes momentos de la etapa de recría/transición.

Conclusión:

  • La categorización de los lechones según su peso al destete es una práctica frecuentemente implementada en granjas de todo el mundo.
  • Numerosas investigaciones han evidenciado que la implementación de esta práctica, sin aplicar posteriormente medidas de manejo específicas para cada grupo (livianos, medianos y pesados), no mejora el rendimiento productivo ni favorece la homogeneidad del lote.

 

Bibliográfia:

  • Bruininx, E.; Van Der Peet-Schwering, C.; Schrama, J.; Vereijken, P.; Vesseur, P.; Everts, H.; den Hartog, L. & Beynen, A. (2001). Individually measured feed intake characteristics and growth performance of group-housed weanling pigs: effects of sex, initial body weight, and body weight distribution within groups. Journal of animal science, 79(2), 301-308.
  • Faccin, J.; Laskoski, F.; Quirino, M.; Gonçalves, M.; Mallmann, A.; Orlando, U.; Mellagi, A.; Bernardi, M.; Ulguim, R. & Bortolozzo, F. (2020). Impact of housing nursery pigs according to body weight on the onset of feed intake, aggressive behavior, and growth performance. Tropical animal health and production, 52, 1073-1079.
  • Fels, M. & Hoy, S. (2013). Effects of sorting weaner pigs by weight on growth performance, aggressive interactions and skin lesion score after mixing. Berliner und Munchener Tierarztliche Wochenschrift, 126(3-4):121-129.

 

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